A él se han suscrito una docena de asociaciones en defensa de los derechos de las personas con baja visión para lograr su plena integración en la sociedad. Será trasladado a los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados.
En el manifiesto, los afectados (que suman 1,041.358 personas, según la Encuesta de Discapacidad, Autonomía Personal y Situaciones de Dependencia (EDAD), elaborada por el INE) consideran que «el empoderamiento de las personas con baja visión es una necesidad urgente dado que ni la sociedad, ni los poderes públicos, ni los movimientos de las personas con discapacidad han reconocido sus necesidades e intereses».
En el manifiesto se reivindica que el Ministerio de Sanidad elabore una lista de productos utilizados por las personas con baja visión incluyéndolos en la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud.
Así mismo, se demanda que los productos de apoyo que precisa este colectivo, tengan un IVA superreducido (4 %), un plan estratégico de salud visual con atención psicosocial, que el Pacto de Estado contra la violencia de género contemple la protección de mujeres con esta discapacidad, accesibilidad en las instalaciones del entorno urbano y transportes y en el derecho al voto ya que hasta ahora, dicen, estas facilidades solo se aplican a votantes que usan el sistema Braille.