Recursos y estrategias para manejar la baja visión

Existen numerosos recursos, dispositivos y estrategias que permiten a las personas mantener su independencia y mejorar su calidad de vida.

Ayudas Ópticas

Estas herramientas están diseñadas para optimizar el uso de la visión residual al modificar o ampliar las imágenes que percibimos:

  • Sistemas electrónicos
  • Telescopios
  • Lentes
  • Lupas
  • Gafas con filtros de color
  • Tratamientos antirreflejo
  • Gafas de sol
dibujos en blanco y negro de ayudas ópticas

Ayudas No Ópticas

Más allá de mejorar la visión, aquí nos centramos en facilitar tareas cotidianas y adaptarse al entorno.

  • Bastones verdes, blancos y blancos y rojos
  • Perros guía
  • Distintivos «Tengo Baja Visión»
dibujo de personas con distintas realidades (bastón verde, perro asistencia, chapa tengo baja visión

Rehabilitación Visual

La rehabilitación visual es mucho más que un conjunto de ejercicios. Es un proceso personalizado, diseñado por un equipo multidisciplinar, que busca maximizar el aprovechamiento de la visión residual y promover la autonomía personal. Este proceso incluye:

  • Evaluación funcional de la visión: Determinar cuánto y cómo se utiliza la visión en actividades cotidianas.
  • Entrenamiento en el uso de ayudas visuales: Aprender a manejar dispositivos ópticos y no ópticos para sacarles el máximo partido.
  • Habilidades visuales y compensatorias: Trabajar en aspectos como la fijación, exploración y seguimiento visual, además de estrategias como ajustar iluminación, contrastes o posiciones para optimizar la percepción.
  • Movilidad y orientación: Técnicas para desplazarse con seguridad tanto en entornos conocidos como nuevos.

Estrategias Tecnológicas y del Entorno

La tecnología juega un papel clave en el manejo de la baja visión:

  • Dispositivos electrónicos: Lectores de pantalla, software de ampliación o aplicaciones móviles que identifican objetos o texto.
  • Adaptaciones del entorno: Iluminación adecuada, colores contrastados en el hogar o señalización clara en espacios públicos.

Apoyo y Hábitos Saludables

El manejo de la baja visión no solo requiere el uso de herramientas específicas, sino también atender otros aspectos clave para mejorar la calidad de vida:

  • Asociaciones y entidades especializadas: Formar parte de organizaciones como Acción Visión España o sus entidades adheridas puede ser de gran ayuda, podrás recibir:
    • Información actualizada sobre ayudas técnicas y tecnológicas.
    • Asesoramiento en derechos legales y procedimientos administrativos.
    • Recursos para facilitar la adaptación en ámbitos laborales y educativos.
    • Espacios para compartir experiencias y recibir apoyo emocional.
  • Revisiones oftalmológicas periódicas: Es fundamental realizar exámenes visuales de forma regular para monitorizar cambios en la visión, prevenir complicaciones y adaptar las ayudas si es necesario.
  • Cuidado general de la salud visual: Mantener un estilo de vida saludable también contribuye al bienestar visual. Esto incluye:
    • Alimentación equilibrada que favorezca la salud ocular.
    • Control de enfermedades que puedan afectar la visión, como la diabetes o la hipertensión.
    • Uso adecuado de gafas de sol para protegerse de los rayos UV.