La Dirección General de Tráfico (DGT) continúa intentando hacer de las carreteras españolas un lugar más seguro por el que circular. Con este objetivo en mente, no paran de actualizar las normativas de tráfico para que no se estanquen y se adecúen a los nuevos tiempos. Esta organización ha emitido recientemente un comunicado para aclarar la controversia surgida en torno a las gafas premontadas y su idoneidad para la conducción. El debate se desató después de que Salvador Alsina, presidente de Visión y Vida, afirmara que estas gafas estaban prohibidas para conducir.
Según la DGT, si bien no están prohibidas de manera explícita, las gafas premontadas no son recomendables para quienes sufren problemas de visión, especialmente aquellos relacionados con la visión de lejos, esencial para la conducción. El Reglamento General de Conductores establece que la graduación y el tipo de cristal deben adaptarse a las necesidades individuales de cada persona al volante.
¿Qué son las gafas premontadas?
Las gafas premontadas son lentes de lectura que vienen preensambladas con una graduación estándar, generalmente en incrementos de dioptrías comunes (por ejemplo, +1.00, +1.50, +2.00, etc.). Las gafas premontadas son útiles porque están listas para usar sin necesidad de una receta específica de un oftalmólogo. Sin embargo, no son adecuadas para corregir problemas de visión más complejos o individuales. Si alguien necesita corrección visual personalizada o tiene otros problemas oculares, como astigmatismo o miopía, es recomendable que consulte a un oftalmólogo para obtener una evaluación y una receta adecuada.
Las gafas premontadas, caracterizadas por tener una graduación estándar y generalmente adaptadas para problemas de visión de cerca, no cumplen con este criterio, lo que las hace menos adecuadas para conducir. La DGT enfatiza la importancia de utilizar gafas o lentes de contacto adecuadas para garantizar una visión óptima al volante. Recomienda especialmente las gafas progresivas, diseñadas no solo para corregir problemas de visión de cerca, sino también para aquellos relacionados con la visión de lejos, esenciales para la conducción segura.
Además de estas recomendaciones, la DGT ofrece una serie de consejos para conductores con problemas de visión, incluyendo el uso de gafas de sol adecuadas, la reducción de la velocidad en caso de dificultades para ver correctamente y la planificación de viajes evitando condiciones climáticas adversas.