Restaurar, incluso regenerar, las alteraciones de la aniridia comienza a ser una realidad. Así lo hizo saber Cheryl Y Gregory-Evans (Universidad de Vancouver, Canadá), durante la Conferencia Europea de Aniridia, que se celebró el pasado mes de agosto en Duisburgo (Alemania).
La Asociación Española de Aniridia, que participó en dicha conferencia, recibió esta noticia con esperanza, pero con cautela, al estar todavía en ensayo clínico y no conocer aún los resultados del mismo. Según explicó la doctora, actualmente se está desarrollando una novedosa terapia génica para una alteración concreta en los pacientes con aniridia congénita. De hecho, en estos momentos se está realizando un ensayo clínico en niños con aniridia para tratar las alteraciones provocadas por el mal funcionamiento del gen Pax6, responsable, en la mayoría de los casos, de esta enfermedad de baja prevalencia, la aniridia.
En dicha conferencia europea, en la que se dieron cita reconocidos profesionales expertos en aniridia, la Dra. Barbara Kaesmann, de la Universidad de Homburg y organizadora del evento junto con la Asociación Alemana de Aniridia, presentó las posibles anomalías en otros genes, con los que trabaja en red el gen de trascripción Pax6, como es, el FOXC1 o PITX2, así como la necesidad del trabajo coordinado de los genetistas y los oftalmólogos, tal y como también resaltó la Dra. Veronica van Heyningen, del Reino Unido.
La observación de los síntomas y la asociación con la alteración genética (relación fenotipo-genotipo) puede llevar a un mejor diagnóstico y tratamiento para estos pacientes, pues en algunos pacientes con una apariencia similar a la aniridia, que fueron diagnosticados como tal, se descubrió que en realidad padecían síndromes como el de Rieger o el de Peter, al realizarles el diagnóstico genético y encontrar alteraciones cromosómicas. Esta observación lleva también a los investigadores, según dijo el Dr. Lauderdale de EEUU, a estudiar el impacto del gen PAX6, aparte de en los ojos, en el sistema endocrino, en el páncreas y en el cerebro (cuerpo calloso y glándula pineal).
Una mesa redonda se dedicó al Síndrome WAGR (Tumor de Wilms, Aniridia, Alteraciones Genito-urinarias y Retraso, que afecta a un 6% de los niños con aniridia, en la que se contó con la presencia de Kelly Trout, gerente de la Asociación International para el Síndrome de WAGR y que habló sobre el un estudio de investigación que se está llevando a cabo en el Instituto Nacional de la Salud NHI de EEUU.
También se presentó lo último en la investigación con células madre del limbo y córneas cultivadas, como tratamiento para reparar la queratopatía corneal en los pacientes con aniridia. El estudio de la morfología, biología y fisiopatología del limbo ocular en estos pacientes, nos permite entender las causas de su mal funcionamiento, según afirmó el dr. Tor Utheim de la Universidad de Oslo, Noruega.
La dimensión internacional la dieron otros ponentes, como el Dr. Netland de EEUU, así como la Dra. Tatyana A. Vasilyeva de Rusia y el, Dr. Lim Hyun Taek de Corea, que presentaron los resultado de estudios realizados con pacientes con aniridia en sus respectivos países.
Las ayudas de baja visión fue también un tema que se abordó en esta conferencia, como instrumentos para aprovechar el resto visual y mejorar la calidad de vida e integración de estas personas en la sociedad, barreras que reflejaron muy bien los representantes de los pacientes en su presentación
Los participantes quedaron emplazados a la conferencia que tendrá lugar dentro de dos años en Paris, Francia.