Desde el 7 de abril de 1950, se conmemora el Día Mundial de la Salud.
Mediante el lema elegido este año «Nuestro planeta, nuestra salud», la Organización Mundial de la Salud, pide a los gobiernos, empresas y ciudadanía que cuenten las medidas que están adoptando para proteger nuestra salud y la de nuestro planeta.
Ya lo decía la canción, «Tes cosas hay en la vida Salud, dinero y amor». Salud, en primer lugar y en mayúscula… y es que sin ella, no hacemos nada.
La OMS la ha definido como “un estado completo de bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”.
En este sentido, se hace imprescindible una cobertura sanitaria universal, garantizando el acceso de todas las personas a los servicios médicos independientemente de su situación económica. Ésto contribuiría al desarrollo sostenible.
Igualmente, se hace necesaria la eliminación de la contaminación atmosférica, el control del impacto del cambio climático y por supuesto hábitos saludables en nuestro día a día (alimentación, deporte…).
Una sociedad centrada en el bienestar depende de todos.